LA HABANA, Cuba, noviembre, www.cubanet.org -En Cuba, hay varios tipos de comidas tradicionales, consideradas criollas, pero la más popular consiste en frijoles negros, arroz blanco, carne de cerdo, yuca y ensalada. Esto ha sido una referencia dominante para los cocineros domésticos a lo largo del país. Y es sin dudas un hecho histórico culinario, que la tradición ha preservado durante varias generaciones de cubanos.
En particular, los frijoles negros se cocinan de diversas formas. Hay a quienes les gustan “dormidos”, o sea, bien cuajados. También varían ligeramente las recetas en lo que respecta a los ingredientes. Algunas llevan vinagre, vino seco, ajo, ají, cebolla, azúcar, laurel, comino y orégano, lo que encarece la elaboración de los frijoles.
Es posible comprar estos productos en los mercados “privados”, en variantes manufacturadas artesanalmente en casas; como el vinagre, el vino seco y los condimentos, que el pueblo ha bautizado como “peleones”. El precio es de 10 pesos la botella, para los líquidos, y de un peso por un pequeño paquete para los aliños. Los frijoles negros, por su parte, se han encarecido y en estos momentos una libra cuesta 15 pesos. No obstante, es el más barato de todos los granos, pues los colorados cuestan 18, los blancos 20, los garbanzos –de mala calidad y que no se ablandan- 21, y los conocidos como caritas, 22.
Pero si se le suma a los frijoles el precio del ají pimiento, entre 3 y 4 pesos la unidad; la cebolla, un pequeño macito cuesta entre 12 y 15 pesos; y el ajo, entre 3 y 5 pesos la cabeza, se llega a la conclusion de que se necesitan más de 50 pesos para hacer un potaje.
Cabría señalar que en algunos lugares del este del país, donde las dificultades para conseguir alimentos son aun mayores, incluyendo la mayor pobreza, ha surgido la costumbre de echarle a los frijoles negros fideos para que “crezcan”, y los condimentan con yerbas como el cilantro, sembradas en macetas en las casas.
La carne de cerdo, ya es un asunto mayor. Una libra de bistec de cerdo, tiene un precio de 40 pesos. Como se acaba la época del aguacate, los más baratos no bajan de 15 pesos, y al comenzar la cosecha del tomate, la libra está entre los 8 y 10 pesos. De todo ello, lo más asequible sería la yuca, a 3 pesos la libra.
Si esta cena tan criolla, cotidiana en los hogares de los cubanos más pobres hasta 1959, se prepara a inicios del mes, el cocinero podrá contar con el arroz de la cuota, que venden más barato mediante la libreta de racionamiento. Pero después del día 15, ya la mayoría de las familias consumieron la cuota mensual, así que tendrían que comprar el arroz a 5 pesos la libra.
En fin, que para preparar una sola vez la más corriente comida criolla para una familia, sin ningún tipo de sofisticación, en estos momentos se necesitan más de 100 pesos, lo que equivale a un tercio del salario mensual promedio de cualquier trabajador en el país.
Se acerca la Natividad de Jesús, y el regimen, después de muchos años de haber prohibido su celebración, ha declarado nuevamente feriado el 25 de diciembre, aunque muchas personas, sobre todo los jóvenes, ignoran el significado de este asueto. Una típica cena criolla siempre fue indispensable para los cubanos, hasta los más humildes, en la celebración de la víspera, conocida por todos como Nochebuena.
Ahora que ya está llegando diciembre, y la “revolución” nos ha dado permiso nuevamente para celebrar la Nochebuena, me pregunto: ¿Cómo hará la mayoría de los cubanos para poner en sus mesas la cena tradicional este 24 de diciembre?