LiberPress- La Habana- 28 de Abril de 2007-
La cara pública de la moneda
El Ministro de Relaciones Exteriores de España, señor Miguel Ángel Moratinos, dijo ante el Senado español, el pasado martes 24 de abril, que no se quiere adjudicar el mérito de seis “liberaciones” de presos políticos, después de su visita a Cuba. También se refirió -en su turno de réplica a Gustavo de Aristegui- al hecho de que gracias a su gestión, desde que el gobierno socialista tomó el poder, se han producido más de 52 excarcelaciones de presos políticos.AntecedentesDurante su reciente visita a Cuba, delante del señor Moratinos, el canciller cubano llamó a los disidentes presos–como usualmente hace- “mercenarios y terroristas” y el Ministro de Exteriores de España lo permitió.En el período desde que el gobierno socialista tomó el poder, al cierre de la información del mes de diciembre del 2006, se habían llevado a prisión más de 100 disidentes, sin contar las detenciones arbitrarias.
La cara oculta de la moneda
La Constitución de la República establece:
La Constitución de la República establece:
Artículo 53.- Se reconoce a los ciudadanos libertad de palabra y prensa conforme a los fines de la sociedad socialista. Las condiciones materiales para su ejercicio están dadas por el hecho de que la prensa, la radio, la televisión, el cine y otros medios de difusión masiva son de propiedad estatal o social y no pueden ser objeto, en ningún caso, de propiedad privada, lo que asegura su uso al servicio exclusivo del pueblo trabajador y del interés de la sociedad.
Artículo 62.- Ninguna de las libertades reconocidas a los ciudadanos puede ser ejercida contra lo establecido en la Constitución y las leyes, ni contra la existencia y fines del Estado socialista, ni contra la decisión del pueblo cubano de construir el socialismo y el comunismo. La infracción de este principio es punible.
Artículo 62.- Ninguna de las libertades reconocidas a los ciudadanos puede ser ejercida contra lo establecido en la Constitución y las leyes, ni contra la existencia y fines del Estado socialista, ni contra la decisión del pueblo cubano de construir el socialismo y el comunismo. La infracción de este principio es punible.
Esto es precisamente lo que le permite al régimen llevar a las mazmorras a los que piensan diferente, aunque poco caso hace de sus propias leyes. Los 6 presos que fueron sacados de sus respectivas cárceles –a los que se refería Moratinos- son: Manuel Pérez Soria, Lázaro Alonso Román y Emilio Leyva Pérez; sancionados a 2 años de privación de libertad, presos desde el 13 de julio del 2005. Los documentos que recibieron al salir dicen: cumplimiento de sanción. Ciertamente no cometieron ningún delito, ya que fueron a echar flores al mar, en conmemoración del hundimiento -por el gobierno cubano- del Remolcador 13 de Marzo y las turbas de las Brigadas de Respuesta Rápida los atacaron, sin embargo el Tribunal que los sancionó, injustamente, los acusó a ellos de desorden público.
Los otros tres, fueron sometidos a prisión por el concepto de Peligrosidad Predelictiva, algo así como: “por si acaso cometen algún delito, que ya estén presos”: Dulian Ramírez Ballester, 2 años de privación de libertad, confinado desde el 12 de mayo del 2005. Sanción cumplida. José Díaz Silva, 4 años de privación de libertad, recluido desde el 21 de diciembre del 2004. Elio Enrique Chávez Ramón, 3 años de privación de libertad, detenido el 5 de abril del 2005.
Sugerencias
Cabría preguntarle al señor Moratinos, si el régimen cubano para complacer las posibilidades de hablar de su gestión ante el Parlamento, encarcela disidentes para que después él pueda decir que salieron “gracias a su gestión”.También la visita a Cuba del Ministro del Interior, llevó a prisión el pasado 13 de abril del 2007 a Oscar Sánchez Madam, periodista independiente de la provincia de Matanzas, que escribió un documento cuestionando la “cortesía” de Moratinos durante su estancia en Cuba. Fue condenado a cuatro años de cautiverio por “Peligrosidad Predelictiva”. Como respuesta a su “desatino”, tres combatientes del Ministerio del Interior, lo agredieron en el pueblo de Cidra cuando se dirigía a Pedro Betancourt. ¿Se le informó de esto al Parlamento español?
Martha Beatriz Roque Cabello