De la Mesa de Trabajo de Martha Beatriz Roque
Documento No.103
Informa Eriberto Liranza Llorente
En horas del medio día del 7 de junio, el “Movimiento Línea Dura”, en unidad con otros movimientos de oposición al régimen castrista, se preparaba para inaugurar un “Círculo de Estudio sobre Desobediencia Civil de Opositores Pacíficos”; sería el anfitrión Carmelo Rodríguez, joven de 20 años y activista de este Movimiento.
Al acercarse la hora acordada, ya estaba montado un fuerte operativo de la Policía Política, los que con motocicletas “Suzuki” y autos “Lada”, impedían el paso a todos los que circulaban por ese lugar, para que no se realizara la actividad.
El señor Alfredo Montano Ramos, presidente de la Liga Cívica Martiana, que estaría apoyando la actividad, llegó al lugar y fue inmediatamente interceptado por el oficial “Abel” de la Seguridad del Estado, -famoso por su forma abusiva hacia los disidentes- molesto por lo arbitrario de la detención, el señor Montano protestó de forma verbal, lo que despertó la ira de los oficiales que le aplicaron técnicas de inmovilización.
Ante los gritos del señor Montano, Ernesto Ramírez López y Carmelo Ramírez, -padre e hijo-, se dirigieron al lugar para socorrer al hermano de lucha y unirse a la protesta. Ambos fueron igualmente maltratados, y el oficial “Bolodia”, dijo al jovencito, que iba a tomar su caso como algo personal.
Los tres quedaron maniatados por las apretadas esposas que les pusieron, fueron lanzados dentro de un auto Lada. El automóvil lo conducía un oficial que a toda velocidad, los trasladó hasta la Unidad de Aguilera en el Municipio Diez de Octubre en Ciudad de La Habana.
Mientras estos opositores permanecían detenidos, otro grupo que estuvo en el lugar, se dirigió hasta la Unidad de la PNR del Capri, en Arroyo Naranjo, con la intención de realizar protestas a favor de los prisioneros. Se presentaron con carteles que rezaban los nombres de los detenidos.
Un capitán al mando de la Unidad les aseguró que la Seguridad del Estado no los había llevado para esa Estación Policial. Los manifestantes dijeron que si no aparecían pronto llevarían la protesta hasta “Villa Marista”, cuartel general de la Policía Política en Cuba. Una hora más tarde recibieron un mensaje del señor Montano, diciendo que ya habían sido liberados.
Por todas partes los cuerpos de lo activistas mostraban signos de violencia, estaban llenos de hematomas y de sangre. Luego testificaron que dentro del carro, iban siendo golpeados por Abel, Bolodia y otro de los que iban sentados encima de ellos, pues el asiento del auto era de tres plazas y no cabían dentro.
Alfredo Montano, cojeaba por el dolor en un pie recién operado, mientras se quejaba del hematoma en sus muñecas causado por las esposas. Uno de los pómulos de Ernesto fue hinchado por los golpes de los militares. El joven Carmelo, mostraba como sus manos y el codo izquierdo, se hinchaban debido a los estrellones que le ejecutaron “Abel” y “Bolodia”.
En las fotos:
Espalda y brazo izquierdo del joven Carmelo Rodríguez
Manos y antebrazo de Carmelo con signos de violencia
Antebrazo izquierdo y espalda de Ernesto Rodríguez
Ernesto asegura que los oficiales “Abel”, “Bolodia” y otros no identificados, le causaron tales daños.
Antebrazo derecho de Alfredo Montano, lesionado por las esposas.
Los tres opositores violentados por la Seguridad del Estado, el 7 de Junio de 2010.