20 de mayo de 2013. Cuba actualidad, Centro Habana, La Habana, (PD)
Quizás el guarismo 10 millones sea de mal agüero. Es posible que tenga hecho un maleficio, porque como meta, al parecer es inalcanzable.
Fue de 10 millones de toneladas de azúcar el pronóstico de la zafra azucarera cubana en el año 1970, y se quedó en el 85 %; tenían razón los escépticos que le decían a Fidel Castro que no llegaría a esa cifra, entre ellos el Ministro de la Industria Azucarera, al que le costó su cargo.
Recientemente, en las elecciones de Venezuela, Nicolás Maduro también decía que tendría la victoria con esa cantidad de votantes y se quedó en un 75%.
De 19 millones de electores –aproximadamente- asistió a las urnas el 78%, del cual, según el Consejo Nacional Electoral, el actual presidente recibió unas décimas porcentuales más que el 50%, mientras su oponente Henrique Capriles recibía unas décimas menos.
Sin embargo, las noticias oficiales y los propios dirigentes gubernamentales se refieren a que la mayoría del pueblo venezolano apoya el proyecto de Hugo Chávez, ya que votó por Maduro, lo que parece indicar que ignoran que los números no son alterables una vez que se divulgan.
La palabra "mayoría" está alrededor de los 200 mil votos. En cifras absolutas, apoyando a la "Revolución Bolivariana" hay unos 7 millones y medio de personas, lo que no es la mayoría de la población, solo representa el 39,47% de aquellos que estaban habilitados para votar. Habría que recordar que 4,2 millones de personas, o sea, el 22% del padrón electoral, no estuvo interesado en decir sus preferencias en las urnas, por lo que si bien no apuntalaron a Capriles, tampoco a Maduro.
Aunque aún el candidato de la oposición dice que hay que auditar las urnas y se prepara un pequeño show en la Comisión Nacional Electoral para ello. Siempre se ha afirmado que el resultado de las elecciones no tiene marcha atrás y Maduro ha apresurado algunas decisiones, como su toma de posesión.
También Maduro visitó La Habana, el pasado 26 de abril, con el pretexto de la XIII Reunión de la Comisión Mixta Intergubernamental Cuba-Venezuela; ocasión que aprovechó para recibir 5 horas de orientaciones directas de Fidel Castro, firmó 3 convenios relacionados con salud, cultura y educación; tres de las antiguas piedras preciosas de la corona de éxitos de la mal llamada "Revolución Cubana". Aprovechó la ocasión para recalcar, en esta su primera visita como presidente, que ambos países iban a continuar trabajando juntos, en una alianza estratégica, ya que juegan un papel fundamental en las soluciones unionistas de la región.
Pero, precisamente los cubanos nos quejamos de lo mal que funcionan estas actividades dentro del país. Mientras más se recurre a la exportación de médicos, profesores y artistas, peor será el comportamiento de estas funciones en la isla; además los que tienen que velar por su buena ejecución, se dedican a supervisar lo que hacen los que están fuera de su patria, ayudando como internacionalistas a otras naciones.
El jefe de la delegación venezolana fue Rafael Ramírez, ministro de Energía y Petróleo, y también presidente de PDVSA. Indiscutiblemente, este es el rubro que más le interesa al régimen que se mantenga en negociación, ya que básicamente el país camina gracias a la "generosidad" con la que Chávez donaba el oro negro y ahora tienen que buscar que su reemplazo lo siga haciendo.
Habrá que darle muchas lecciones de 5 horas a Maduro para que pueda mantenerse en el poder en Venezuela, porque no tiene ni la mayoría del pueblo a su favor, ni el liderazgo de "su pajarito" y mucho menos la capacidad para poder dirigir una nación como esa, de unos 28 millones de habitantes. Los próximos meses serán cruciales para definir lo que sucederá en ese país.